En la parte inferior se proporciona una lista de afirmaciones que una persona puede usar para describirse.

Por favor, lea cada afirmación y en base a la escala de evaluación decida cuán bien lo describe.

Cuando usted no esté seguro(a), base su respuesta en lo que usted siente, no en lo que usted piense que debería ser correcto.

Número de teléfono:

Muchas veces no tuve a alguien que me cuide, que comparta su tiempo conmigo o que prestará atención a todas las cosas que me sucedían.

En general, la gente no ha estado conmigo para proporcionarme protección, sostén y afecto.

Durante la mayor parte de mi vida, no he sentido que haya sido especial para alguien

En general, no he tenido a alguien que realmente me preste atención, me comprenda o que sintonice con mis verdaderas necesidades y sentimientos.

Pocas veces he tenido a una persona importante que me brinde buenos consejos u orientación cuando no estaba seguro de lo que tenía que hacer.

Me doy cuenta que me aferro a la gente cercana a mí porque tengo temor de que me pueda dejar.

Necesito tanto a otras personas que me preocupa la posibilidad de perderlas.

Cuando siento que alguien que me importa se aleja de mí, llego a desesperarme.

A veces estoy tan preocupado de que la gente me deje que termino alejándola.

Siento que las personas se aprovecharan de mí.

Siento que no debo bajar la guardia ante la gente ya que me pueden hacer daño intencionalmente.

Es sólo cuestión de tiempo esperar a que alguien me engañe

Soy bastante desconfiado respecto a lo que traman los demás

Usualmente estoy alerta para descubrir cuando alguien me está mintiendo.

No soy de encajar en un grupo o en una reunión.

Yo no formo parte de grupo alguno; soy un solitario.

Me siento aislado de otra gente.

Siempre me siento fuera o al margen de los grupos.

Ningún hombre/mujer desearía amarme una vez que viera mis defectos.

Nadie querría estar cerca de mí si realmente me conociera

Soy indigno del amor, atención y respeto de otros.

Siento que no soy simpático

Casi nada de lo que hago en el trabajo (o en los estudios) es tan bueno como lo que otra gente es capaz de hacer.

Soy incompetente cuando se trata de alcanzar logros o metas.

La mayoría de la gente es más exitosa y capaz que yo.

No tengo tanto talento como la mayoría de la gente en mi trabajo (centro de estudios)

No soy tan inteligente como la mayor parte de la gente que trabaja (o estudia).

No soy capaz de arreglármelas solo en la vida diaria.

Pienso que soy una persona dependiente, cuando veo como me desenvuelvo cuando estoy solo.

Carezco de sentido común

No puedo confiar en mi propio juicio para enfrentar las situaciones diarias.

No confió en mi capacidad para solucionar los problemas que acontecen a diario.

Parece que no puedo escapar del sentimiento de que algo malo sucederá.

Siento que un desastre (natural, criminal, económico o médico) puede ocurrir en cualquier momento.

Me preocupa que pueda ser atacado.

Me preocupa que vaya a perder todo mi dinero y terminar como un indigente.

Me preocupa que esté desarrollando una enfermedad grave, aun cuando el médico no me ha diagnosticado nada.

No he sido capaz de independizarme de mis padres, como la gente de mi edad parece haberlo hecho.

Mis padres y yo tendemos a involucrarnos excesivamente en nuestras vidas y problemas.

Con frecuencia siento que mis padres abarcan toda mi vida, por eso casi no tengo una vida propia.

Con frecuencia siento que mi identidad no está separada de mis padres o de mi pareja.

Pienso que si hago lo que quiero, estoy buscando problemas.

Siento que no tengo otra elección que aceptar los deseos de la gente, de lo contrario se desquitarán o me rechazarán de alguna manera.

En mis relaciones, dejo que la otra persona asuma el control.

Siempre he dejado que otra persona elija por mí, por ello ahora no sé qué es lo que quiero en verdad.

Tengo dificultades para pedir que mis derechos sean respetados y que mis sentimientos sean tomados en cuenta.

Soy de los que finalmente termino haciéndome cargo de la gente cercana a mí.

Soy una buena persona porque pienso en los otros más que en mí mismo.

Estoy tan ocupado haciendo algo por la gente que quiero, que tengo poco tiempo para mí mismo.

Soy una persona que siempre presta atención a los problemas de todo el mundo.

Otras personas me ven como alguien que hace demasiado por otros y no lo suficiente por mí mismo.

Tengo demasiado autocontrol para mostrar sentimientos positivos a otros (p.e., afecto, demostrar atención).

Siento vergüenza de expresar lo que realmente siento a otros.

Me resulta difícil ser cálido y espontáneo.

Me controlo tanto que la gente piensa que soy reservado e indiferente.

La gente me ve como emocionalmente imperturbable.

Debo ser el mejor en la mayoría de las cosas que hago; no puedo aceptar ser el segundo.

Procuro hacer lo mejor; no me conformo con algo “suficientemente bueno”.

Debo cumplir con todas mis responsabilidades.

Siento que hay una presión constante sobre mí para llevar a cabo y lograr que las cosas se cumplan.

No puedo dejar de culparme o de elaborar excusas por mis errores.

Se hace un problema tener que aceptar como respuesta un “no” cuando quiero alguna cosa de otra gente.

Soy alguien especial y no debería tener que aceptar muchas de las restricciones que imponen a otras personas.

Odio ser forzado o que me impongan límites para hacer lo que quiero.

Siento que no debería tener que seguir las reglas y convenciones normales como hacen otras personas.

Siento que lo que tengo que ofrecer es de mucho más valor que las contribuciones de los demás.

Parece que no pudiera tener disciplina para cumplir tareas rutinarias o aburridas.

Si no puedo lograr una meta, me llego a frustrar fácilmente y me doy por vencido.

Tengo mucha dificultad para postergar una gratificación inmediata con miras a lograr una meta importante.

No puedo esforzarme en hacer las cosas que no me agradan, aun cuando sé que es por mi propio bien.

Raramente he sido capaz de mantenerme firme en mis decisiones.

No importa la razón de mis errores, si hago mal debo pagar el precio

He carecido de una persona fuerte para darme consejos o dirección cuando no estoy seguro de qué hacer

A veces me preocupo tanto por que la gente me deje que los alejo

Normalmente estoy en busca de segundas intenciones en la gente

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Por favor, lea cada afirmación y en base a la escala de evaluación decida cuán bien lo describe.

Cuando usted no esté seguro(a), base su respuesta en lo que usted siente, no en lo que usted piense que debería ser correcto.

Número de teléfono:

Muchas veces no tuve a alguien que me cuide, que comparta su tiempo conmigo o que prestará atención a todas las cosas que me sucedían.

En general, la gente no ha estado conmigo para proporcionarme protección, sostén y afecto.

Durante la mayor parte de mi vida, no he sentido que haya sido especial para alguien

En general, no he tenido a alguien que realmente me preste atención, me comprenda o que sintonice con mis verdaderas necesidades y sentimientos.

Pocas veces he tenido a una persona importante que me brinde buenos consejos u orientación cuando no estaba seguro de lo que tenía que hacer.

Me doy cuenta que me aferro a la gente cercana a mí porque tengo temor de que me pueda dejar.

Necesito tanto a otras personas que me preocupa la posibilidad de perderlas.

Cuando siento que alguien que me importa se aleja de mí, llego a desesperarme.

A veces estoy tan preocupado de que la gente me deje que termino alejándola.

Siento que las personas se aprovecharan de mí.

Siento que no debo bajar la guardia ante la gente ya que me pueden hacer daño intencionalmente.

Es sólo cuestión de tiempo esperar a que alguien me engañe

Soy bastante desconfiado respecto a lo que traman los demás

Usualmente estoy alerta para descubrir cuando alguien me está mintiendo.

No soy de encajar en un grupo o en una reunión.

Yo no formo parte de grupo alguno; soy un solitario.

Me siento aislado de otra gente.

Siempre me siento fuera o al margen de los grupos.

Ningún hombre/mujer desearía amarme una vez que viera mis defectos.

Nadie querría estar cerca de mí si realmente me conociera

Soy indigno del amor, atención y respeto de otros.

Siento que no soy simpático

Casi nada de lo que hago en el trabajo (o en los estudios) es tan bueno como lo que otra gente es capaz de hacer.

Soy incompetente cuando se trata de alcanzar logros o metas.

La mayoría de la gente es más exitosa y capaz que yo.

No tengo tanto talento como la mayoría de la gente en mi trabajo (centro de estudios)

No soy tan inteligente como la mayor parte de la gente que trabaja (o estudia).

No soy capaz de arreglármelas solo en la vida diaria.

Pienso que soy una persona dependiente, cuando veo como me desenvuelvo cuando estoy solo.

Carezco de sentido común

No puedo confiar en mi propio juicio para enfrentar las situaciones diarias.

No confió en mi capacidad para solucionar los problemas que acontecen a diario.

Parece que no puedo escapar del sentimiento de que algo malo sucederá.

Siento que un desastre (natural, criminal, económico o médico) puede ocurrir en cualquier momento.

Me preocupa que pueda ser atacado.

Me preocupa que vaya a perder todo mi dinero y terminar como un indigente.

Me preocupa que esté desarrollando una enfermedad grave, aun cuando el médico no me ha diagnosticado nada.

No he sido capaz de independizarme de mis padres, como la gente de mi edad parece haberlo hecho.

Mis padres y yo tendemos a involucrarnos excesivamente en nuestras vidas y problemas.

Con frecuencia siento que mis padres abarcan toda mi vida, por eso casi no tengo una vida propia.

Con frecuencia siento que mi identidad no está separada de mis padres o de mi pareja.

Pienso que si hago lo que quiero, estoy buscando problemas.

Siento que no tengo otra elección que aceptar los deseos de la gente, de lo contrario se desquitarán o me rechazarán de alguna manera.

En mis relaciones, dejo que la otra persona asuma el control.

Siempre he dejado que otra persona elija por mí, por ello ahora no sé qué es lo que quiero en verdad.

Tengo dificultades para pedir que mis derechos sean respetados y que mis sentimientos sean tomados en cuenta.

Soy de los que finalmente termino haciéndome cargo de la gente cercana a mí.

Soy una buena persona porque pienso en los otros más que en mí mismo.

Estoy tan ocupado haciendo algo por la gente que quiero, que tengo poco tiempo para mí mismo.

Soy una persona que siempre presta atención a los problemas de todo el mundo.

Otras personas me ven como alguien que hace demasiado por otros y no lo suficiente por mí mismo.

Tengo demasiado autocontrol para mostrar sentimientos positivos a otros (p.e., afecto, demostrar atención).

Siento vergüenza de expresar lo que realmente siento a otros.

Me resulta difícil ser cálido y espontáneo.

Me controlo tanto que la gente piensa que soy reservado e indiferente.

La gente me ve como emocionalmente imperturbable.

Debo ser el mejor en la mayoría de las cosas que hago; no puedo aceptar ser el segundo.

Procuro hacer lo mejor; no me conformo con algo “suficientemente bueno”.

Debo cumplir con todas mis responsabilidades.

Siento que hay una presión constante sobre mí para llevar a cabo y lograr que las cosas se cumplan.

No puedo dejar de culparme o de elaborar excusas por mis errores.

Se hace un problema tener que aceptar como respuesta un “no” cuando quiero alguna cosa de otra gente.

Soy alguien especial y no debería tener que aceptar muchas de las restricciones que imponen a otras personas.

Odio ser forzado o que me impongan límites para hacer lo que quiero.

Siento que no debería tener que seguir las reglas y convenciones normales como hacen otras personas.

Siento que lo que tengo que ofrecer es de mucho más valor que las contribuciones de los demás.

Parece que no pudiera tener disciplina para cumplir tareas rutinarias o aburridas.

Si no puedo lograr una meta, me llego a frustrar fácilmente y me doy por vencido.

Tengo mucha dificultad para postergar una gratificación inmediata con miras a lograr una meta importante.

No puedo esforzarme en hacer las cosas que no me agradan, aun cuando sé que es por mi propio bien.

Raramente he sido capaz de mantenerme firme en mis decisiones.

No importa la razón de mis errores, si hago mal debo pagar el precio

He carecido de una persona fuerte para darme consejos o dirección cuando no estoy seguro de qué hacer

A veces me preocupo tanto por que la gente me deje que los alejo

Normalmente estoy en busca de segundas intenciones en la gente

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Por favor, lea cada afirmación y en base a la escala de evaluación decida cuán bien lo describe.

Cuando usted no esté seguro(a), base su respuesta en lo que usted siente, no en lo que usted piense que debería ser correcto.

Número de teléfono:

Muchas veces no tuve a alguien que me cuide, que comparta su tiempo conmigo o que prestará atención a todas las cosas que me sucedían.

En general, la gente no ha estado conmigo para proporcionarme protección, sostén y afecto.

Durante la mayor parte de mi vida, no he sentido que haya sido especial para alguien

En general, no he tenido a alguien que realmente me preste atención, me comprenda o que sintonice con mis verdaderas necesidades y sentimientos.

Pocas veces he tenido a una persona importante que me brinde buenos consejos u orientación cuando no estaba seguro de lo que tenía que hacer.

Me doy cuenta que me aferro a la gente cercana a mí porque tengo temor de que me pueda dejar.

Necesito tanto a otras personas que me preocupa la posibilidad de perderlas.

Cuando siento que alguien que me importa se aleja de mí, llego a desesperarme.

A veces estoy tan preocupado de que la gente me deje que termino alejándola.

Siento que las personas se aprovecharan de mí.

Siento que no debo bajar la guardia ante la gente ya que me pueden hacer daño intencionalmente.

Es sólo cuestión de tiempo esperar a que alguien me engañe

Soy bastante desconfiado respecto a lo que traman los demás

Usualmente estoy alerta para descubrir cuando alguien me está mintiendo.

No soy de encajar en un grupo o en una reunión.

Yo no formo parte de grupo alguno; soy un solitario.

Me siento aislado de otra gente.

Siempre me siento fuera o al margen de los grupos.

Ningún hombre/mujer desearía amarme una vez que viera mis defectos.

Nadie querría estar cerca de mí si realmente me conociera

Soy indigno del amor, atención y respeto de otros.

Siento que no soy simpático

Casi nada de lo que hago en el trabajo (o en los estudios) es tan bueno como lo que otra gente es capaz de hacer.

Soy incompetente cuando se trata de alcanzar logros o metas.

La mayoría de la gente es más exitosa y capaz que yo.

No tengo tanto talento como la mayoría de la gente en mi trabajo (centro de estudios)

No soy tan inteligente como la mayor parte de la gente que trabaja (o estudia).

No soy capaz de arreglármelas solo en la vida diaria.

Pienso que soy una persona dependiente, cuando veo como me desenvuelvo cuando estoy solo.

Carezco de sentido común

No puedo confiar en mi propio juicio para enfrentar las situaciones diarias.

No confió en mi capacidad para solucionar los problemas que acontecen a diario.

Parece que no puedo escapar del sentimiento de que algo malo sucederá.

Siento que un desastre (natural, criminal, económico o médico) puede ocurrir en cualquier momento.

Me preocupa que pueda ser atacado.

Me preocupa que vaya a perder todo mi dinero y terminar como un indigente.

Me preocupa que esté desarrollando una enfermedad grave, aun cuando el médico no me ha diagnosticado nada.

No he sido capaz de independizarme de mis padres, como la gente de mi edad parece haberlo hecho.

Mis padres y yo tendemos a involucrarnos excesivamente en nuestras vidas y problemas.

Con frecuencia siento que mis padres abarcan toda mi vida, por eso casi no tengo una vida propia.

Con frecuencia siento que mi identidad no está separada de mis padres o de mi pareja.

Pienso que si hago lo que quiero, estoy buscando problemas.

Siento que no tengo otra elección que aceptar los deseos de la gente, de lo contrario se desquitarán o me rechazarán de alguna manera.

En mis relaciones, dejo que la otra persona asuma el control.

Siempre he dejado que otra persona elija por mí, por ello ahora no sé qué es lo que quiero en verdad.

Tengo dificultades para pedir que mis derechos sean respetados y que mis sentimientos sean tomados en cuenta.

Soy de los que finalmente termino haciéndome cargo de la gente cercana a mí.

Soy una buena persona porque pienso en los otros más que en mí mismo.

Estoy tan ocupado haciendo algo por la gente que quiero, que tengo poco tiempo para mí mismo.

Soy una persona que siempre presta atención a los problemas de todo el mundo.

Otras personas me ven como alguien que hace demasiado por otros y no lo suficiente por mí mismo.

Tengo demasiado autocontrol para mostrar sentimientos positivos a otros (p.e., afecto, demostrar atención).

Siento vergüenza de expresar lo que realmente siento a otros.

Me resulta difícil ser cálido y espontáneo.

Me controlo tanto que la gente piensa que soy reservado e indiferente.

La gente me ve como emocionalmente imperturbable.

Debo ser el mejor en la mayoría de las cosas que hago; no puedo aceptar ser el segundo.

Procuro hacer lo mejor; no me conformo con algo “suficientemente bueno”.

Debo cumplir con todas mis responsabilidades.

Siento que hay una presión constante sobre mí para llevar a cabo y lograr que las cosas se cumplan.

No puedo dejar de culparme o de elaborar excusas por mis errores.

Se hace un problema tener que aceptar como respuesta un “no” cuando quiero alguna cosa de otra gente.

Soy alguien especial y no debería tener que aceptar muchas de las restricciones que imponen a otras personas.

Odio ser forzado o que me impongan límites para hacer lo que quiero.

Siento que no debería tener que seguir las reglas y convenciones normales como hacen otras personas.

Siento que lo que tengo que ofrecer es de mucho más valor que las contribuciones de los demás.

Parece que no pudiera tener disciplina para cumplir tareas rutinarias o aburridas.

Si no puedo lograr una meta, me llego a frustrar fácilmente y me doy por vencido.

Tengo mucha dificultad para postergar una gratificación inmediata con miras a lograr una meta importante.

No puedo esforzarme en hacer las cosas que no me agradan, aun cuando sé que es por mi propio bien.

Raramente he sido capaz de mantenerme firme en mis decisiones.

No importa la razón de mis errores, si hago mal debo pagar el precio

He carecido de una persona fuerte para darme consejos o dirección cuando no estoy seguro de qué hacer

Psicométrico #6: YSQ

Número de teléfono:

Muchas veces no tuve a alguien que me cuide, que comparta su tiempo conmigo o que prestará atención a todas las cosas que me sucedían.

En general, la gente no ha estado conmigo para proporcionarme protección, sostén y afecto.

Durante la mayor parte de mi vida, no he sentido que haya sido especial para alguien

En general, no he tenido a alguien que realmente me preste atención, me comprenda o que sintonice con mis verdaderas necesidades y sentimientos.

Pocas veces he tenido a una persona importante que me brinde buenos consejos u orientación cuando no estaba seguro de lo que tenía que hacer.

Me doy cuenta que me aferro a la gente cercana a mí porque tengo temor de que me pueda dejar.

Necesito tanto a otras personas que me preocupa la posibilidad de perderlas.

Cuando siento que alguien que me importa se aleja de mí, llego a desesperarme.

A veces estoy tan preocupado de que la gente me deje que termino alejándola.

Siento que las personas se aprovecharan de mí.

Siento que no debo bajar la guardia ante la gente ya que me pueden hacer daño intencionalmente.

Es sólo cuestión de tiempo esperar a que alguien me engañe

Soy bastante desconfiado respecto a lo que traman los demás

Usualmente estoy alerta para descubrir cuando alguien me está mintiendo.

No soy de encajar en un grupo o en una reunión.

Yo no formo parte de grupo alguno; soy un solitario.

Me siento aislado de otra gente.

Siempre me siento fuera o al margen de los grupos.

Ningún hombre/mujer desearía amarme una vez que viera mis defectos.

Nadie querría estar cerca de mí si realmente me conociera

Soy indigno del amor, atención y respeto de otros.

Siento que no soy simpático

Casi nada de lo que hago en el trabajo (o en los estudios) es tan bueno como lo que otra gente es capaz de hacer.

Soy incompetente cuando se trata de alcanzar logros o metas.

La mayoría de la gente es más exitosa y capaz que yo.

No tengo tanto talento como la mayoría de la gente en mi trabajo (centro de estudios)

No soy tan inteligente como la mayor parte de la gente que trabaja (o estudia).

No soy capaz de arreglármelas solo en la vida diaria.

Pienso que soy una persona dependiente, cuando veo como me desenvuelvo cuando estoy solo.

Carezco de sentido común

No puedo confiar en mi propio juicio para enfrentar las situaciones diarias.

No confió en mi capacidad para solucionar los problemas que acontecen a diario.

Parece que no puedo escapar del sentimiento de que algo malo sucederá.

Siento que un desastre (natural, criminal, económico o médico) puede ocurrir en cualquier momento.

Me preocupa que pueda ser atacado.

Me preocupa que vaya a perder todo mi dinero y terminar como un indigente.

Me preocupa que esté desarrollando una enfermedad grave, aun cuando el médico no me ha diagnosticado nada.

No he sido capaz de independizarme de mis padres, como la gente de mi edad parece haberlo hecho.

Mis padres y yo tendemos a involucrarnos excesivamente en nuestras vidas y problemas.

Con frecuencia siento que mis padres abarcan toda mi vida, por eso casi no tengo una vida propia.

Con frecuencia siento que mi identidad no está separada de mis padres o de mi pareja.

Pienso que si hago lo que quiero, estoy buscando problemas.

Siento que no tengo otra elección que aceptar los deseos de la gente, de lo contrario se desquitarán o me rechazarán de alguna manera.

En mis relaciones, dejo que la otra persona asuma el control.

Siempre he dejado que otra persona elija por mí, por ello ahora no sé qué es lo que quiero en verdad.

Tengo dificultades para pedir que mis derechos sean respetados y que mis sentimientos sean tomados en cuenta.

Soy de los que finalmente termino haciéndome cargo de la gente cercana a mí.

Soy una buena persona porque pienso en los otros más que en mí mismo.

Estoy tan ocupado haciendo algo por la gente que quiero, que tengo poco tiempo para mí mismo.

Soy una persona que siempre presta atención a los problemas de todo el mundo.

Otras personas me ven como alguien que hace demasiado por otros y no lo suficiente por mí mismo.

Tengo demasiado autocontrol para mostrar sentimientos positivos a otros (p.e., afecto, demostrar atención).

Siento vergüenza de expresar lo que realmente siento a otros.

Me resulta difícil ser cálido y espontáneo.

Me controlo tanto que la gente piensa que soy reservado e indiferente.

La gente me ve como emocionalmente imperturbable.

Debo ser el mejor en la mayoría de las cosas que hago; no puedo aceptar ser el segundo.

Procuro hacer lo mejor; no me conformo con algo “suficientemente bueno”.

Debo cumplir con todas mis responsabilidades.

Siento que hay una presión constante sobre mí para llevar a cabo y lograr que las cosas se cumplan.

No puedo dejar de culparme o de elaborar excusas por mis errores.

Se hace un problema tener que aceptar como respuesta un “no” cuando quiero alguna cosa de otra gente.

Soy alguien especial y no debería tener que aceptar muchas de las restricciones que imponen a otras personas.

Odio ser forzado o que me impongan límites para hacer lo que quiero.

Siento que no debería tener que seguir las reglas y convenciones normales como hacen otras personas.

Siento que lo que tengo que ofrecer es de mucho más valor que las contribuciones de los demás.

Parece que no pudiera tener disciplina para cumplir tareas rutinarias o aburridas.

Si no puedo lograr una meta, me llego a frustrar fácilmente y me doy por vencido.

Tengo mucha dificultad para postergar una gratificación inmediata con miras a lograr una meta importante.

No puedo esforzarme en hacer las cosas que no me agradan, aun cuando sé que es por mi propio bien.

Raramente he sido capaz de mantenerme firme en mis decisiones.

No importa la razón de mis errores, si hago mal debo pagar el precio

He carecido de una persona fuerte para darme consejos o dirección cuando no estoy seguro de qué hacer

A veces me preocupo tanto por que la gente me deje que los alejo

Normalmente estoy en busca de segundas intenciones en la gente

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